El 26 de abril se celebra en Paraguay el día del Periodista, compartimos hoy las Reglas de Asunción para una comunicación social responsable, un decálogo de pautas éticas para el tratamiento de información que involucre a niños, niñas y adolescentes y que respeta a la audiencia infantil y adolescente.

Reglas de Asunción para una Comunicación Social responsable

Todas las y los Comunicadores Sociales, Periodistas y Autoridades que suscribimos estas Reglas nos comprometemos a trabajar día a día por una comunicación social ética y responsable con el desarrollo de la infancia paraguaya, promoviendo en cada acción de nuestro trabajo el respeto a los derechos de los niños, niñas y adolescentes descritos en la Constitución Nacional del Paraguay, la Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, y el Código de la Niñez y la Adolescencia.

Los suscriptores de estas Reglas nos comprometemos a difundirlas en nuestros lugares de trabajo, a enseñarlas en nuestras universidades y centros de formación, a destacarlas de manera evidente en nuestras salas de redacción, a comprometer a más personas a suscribirlas y -sobre todo- a cumplirlas a cabalidad.

Es fundamental desde los medios de prensa dar el espacio necesario a los niños, niñas y adolescentes para conocer su realidad, buscar alternativas y para que transmitan sus inquietudes al resto de la sociedad. Estos espacios deben ser respetados por los medios como canales de comunicación y participación ciudadana.

Asimismo, se debe promover en los medios de comunicación que existan intérpretes de lenguaje de señas y escritura braille, para que la información llegue de forma directa y sin distorsiones a las personas con discapacidad, promoviendo de este modo una sociedad más inclusiva.

Creemos que el respeto de estas Reglas es el inicio de un mundo mejor para todos los hijos y las hijas de la nación paraguaya; especialmente aquellos que están viviendo en un contexto de exclusión social.

Por eso, nos comprometemos a respetar este decálogo:

1. El interés superior del niño y la niña.
En todo material de difusión masiva, sea éste informativo o publicitario, que se divulgue a través de los medios de comunicación y en el formato que fuere, que involucre o afecte, directa o indirectamente a un niño, niña o adolescente, los comunicadores sociales deberán hacer primar el interés superior del niño, teniendo en cuenta las posibles consecuencias que esta difusión pueda tener en sus vidas.

2. El derecho a la privacidad
No se divulgarán imágenes o informaciones de niños, niñas o adolescentes en estado de vulnerabilidad o datos que permitan identificar a niños, niñas y adolescentes víctimas o agentes de delitos.

3. El derecho a la honra
Los comunicadores sociales respetarán el derecho que tiene todo niño, niña y adolescente a no ser objeto de injerencias en su vida privada, su familia, su domicilio y su correspondencia, y a no ser afectado en su honor.

4. Responsabilidad de los medios de comunicación
Los medios de comunicación ayudarán a difundir la cultura entre los niños, niñas y adolescentes; y los comunicadores sociales tendremos especial preocupación por las minorías de cualquier naturaleza y los miembros de pueblos originarios.

5. Primeros responsables: las personas adultas
Entrevistar a los adultos, sean estos autoridades o profesionales y no a los niños, niñas y adolescentes afectados en los casos en que se lesiona o daña su honra, así como sus familiares directos.

6. Enfoque en los derechos
Trabajar desde la cobertura, redacción y emisión de la noticia, con el enfoque de los derechos de la niñez y adolescencia.

7. Generar siempre una mirada de resiliencia
Cuando se presenta un hecho negativo, desarrollar la noticia contando la verdad de la mejor manera posible, cubriendo la noticia cruda con una perspectiva de salida.

En los casos en que se afecten la dignidad, la honra del niño, niña o adolescente, trabajar la noticia desde la perspectiva de una salida positiva, siempre buscar un concepto de resiliencia, permitiendo con ellos que el público pueda aprender de la experiencia.

8. Ser empáticos
Desarrollar la empatía ubicándonos en el lugar del entrevistado, niño o familiar directo, cuando la dignidad de la persona esté en riesgo. No hay espacio al sensacionalismo en un comunicador socialmente responsable.

9. El derecho al desarrollo integral
Todo tratamiento informativo deberá asegurar el respeto al desarrollo integral del niño, niña y adolescente en todas sus dimensiones: intelectual, física, emocional, social y en su relación con el medio ambiente.

10. Cuidar siempre en la generación de las noticias
a) No utilizar términos peyorativos.

b) Precautelar todos los derechos señalados, tanto de los niños, niñas y adolescentes protagonistas de un hecho, como de los espectadores de la misma franja etaria.

c) El tratamiento de las imágenes deberá ser sensible en relación a los derechos de los niños, niñas y adolescentes, evitando exponer sus datos para su identificación.
Fuente: www.snna.gov.py

Por Ade Comunicaciones

Comunicación, educación y derechos humanos